domingo, 11 de octubre de 2009

La prensa y la dirección del viento


En 1815 Napoleón escapó de su exilio en la Isla de Elba y se dirigió a París, a donde llegó el 20 de Marzo, según dicen, sin necesidad de disparar un solo tiro, aclamado por el pueblo. Retomó entonces el poder durante los famosos Cien Días, hasta que la batalla de Waterloo puso el punto y final al imperio napoleónico.

Es curiosa (y bastante indicativa de los derroteros por los que, en ocasiones, se mueve la prensa) la evolución de los titulares del periódico Le Moniteur Universel a lo largo del mes de marzo de 1815, mientras Napoleón se acercaba a París:
  • 9 de marzo: “El monstruo escapó del lugar de su destierro”
  • 10 de marzo: “El ogro corso ha desembarcado en Cabo Juan”
  • 11 de marzo: “El tigre se ha mostrado en Gap. Están avanzando tropas por todos lados para detener su marcha. Concluirá su miserable aventura como un delincuente en las montañas”
  • 13 de marzo: “El tirano está ahora en Lyon. Todos están aterrorizados por su aparición”
  • 18 de Marzo: “El usurpador ha osado aproximarse hasta 60 horas de marcha de la capital”
  • 19 de marzo: “Bonaparte avanza a marcha forzada, pero es imposible que llegue a París”
  • 20 de marzo: “Napoleón llegará mañana a las murallas de París”
  • 21 de marzo: “El Emperador Napoleón se halla en Fontaineblau”
  • 22 de marzo: “Ayer por la tarde Su Majestad el Emperador hizo su pública entrada a las Tullerías. Nada puede exceder el regocijo universal”
Creo que sobran las palabras. La versión de los titulares aquí recogida se basa en el prólogo del libro Ni ez naiz hemengoa (Yo no soy de aquí) de Joseba Sarrionandía. Una versión ligramente diferente se puede encontrar en Une Année à Florence de Alexandre Dumas.

sábado, 10 de octubre de 2009

Podía, podía...pero no lo sabía


Por si a alguno le resulta útil esta información (a mí desde luego me habría resultado muy útil tenerla hace un mes), resulta que, aunque parezca increíble, como explican muy bien en esta página web, es posible trabajar y cobrar el paro al mismo tiempo, siempre que el contrato sea a tiempo parcial, es decir cuando el número de horas trabajadas al día, a la semana, al mes o al año sea inferior al número de horas de un trabajador a tiempo completo comparable (un trabajador a tiempo completo de la misma empresa, con el mismo tipo de contrato de trabajo y que realice un trabajo idéntico o similar).

Podrá beneficiarse de esta opción quien ya esté cobrando el paro y empiece a trabajar a tiempo parcial o quien tenga dos trabajos a tiempo parcial y pierda uno de ellos. La cantidad que se percibirá es la parte proporcional a la jornada no trabajada; por poner un ejemplo, si un trabajador, en una empresa con un convenio de 40 horas semanales, firma un contrato de 30 horas por semana, el INEM le pagará la cuarta parte de lo que le pagaría si no tuviera ningún trabajo.

Es importante asimismo recordar que el plazo para pedir el paro desde que finaliza tu contrato de trabajo es de 15 días hábiles. Siempre que la petición se haga dentro de este plazo, se empezará a cobrar el desempleo desde el día siguiente a la finalización del contrato. Si la petición se hace fuera de plazo, se perderán todos los días que hayan pasado desde la finalización del contrato. Por ejemplo, si alguien que acaba un contrato el 15 de junio y que tiene, en principio, derecho a 6 meses de desempleo, hace su petición el 23 de junio, cobrará desde el 16 de junio hasta el 16 de diciembre. Pero si hace la petición el 23 de julio, cobrará únicamente desde el 23 de julio hasta el 16 de diciembre, perdiendo el derecho de todos los días entre el 16 de junio y el 23 de julio.

Para calcular la duración y cuantía de la prestación se tendrá en cuenta únicamente el número de días trabajados en los últimos 6 años (o, en su caso, desde la última vez que se percibió la prestación) y el sueldo de los últimos 6 meses respectivamente. En esta página (del INEM) te calculan de modo aproximado la cuantía y duración de la prestación a la que tienes derecho, en función de los datos que hemos mencionado.

Espero que a alguno le sirva toda esta información!

Audio: Hot Stuff (Donna Summer)

viernes, 9 de octubre de 2009

I don't believe in Elvis

Último párrafo del prólogo de un conocido libro de Cosmología:

"As the camera-ready book goes to press, it is completely free of any typographical errors, errors of physics or errors of judgment. Any errors present in the final product must have crept in during the production process, and are wholly the fault of the publisher."

(Es decir: En el momento de ir a la imprenta, el libro se encuentra completamente libre de errores tipográficos, errores en la física o errores de juicio. Cualquier error presente en el producto final debe haberse 'colado' durante el proceso de producción y es culpa exclusiva del editor.)

Ahí es nada la afirmación, tratándose de un libro de 547 páginas. Yo de mayor quiero tener esa seguridad en mí mismo.

Audio: God (John Lennon)

miércoles, 7 de octubre de 2009

La ciencia española no necesita tijeras

Rompo mi silencio de varios meses para unirme a una iniciativa impulsada desde este blog y que ha desembocado en la creación de esta página web.

Hace algunos días que se hicieron públicos los Presupuestos elaborados por el Gobierno para 2010, presupuestos que ahora deben ser discutidos por el Parlamento. Presupuestos que, tristemente, contemplan una reducción del 15% en el dinero destinado a Investigación.

Concretamente, este 15% se refiere a las operaciones "no financieras", es decir, proyectos de investigación, becas o contratos de investigadores no funcionarios. Desde el Gobierno se pretende maquillar el drástico recorte teniendo en cuenta en los cálculos el incremento en la partidas para "operaciones financieras" (es decir, créditos a empresas y grandes proyectos industriales, de los que poco o nada se benefician la ciencia e investigación de base), con lo que la disminución quedaría "tan sólo" en un 3.1%.

A pesar de operaciones de maquillaje y de declaraciones que juegan al despiste, la sombra del 15% es alargada para un Gobierno que en el programa electoral de las penúltimas elecciones, allá por 2004, decía:

"Para garantizar el cumplimiento de los objetivos señalados, incrementaremos los fondos públicos de investigación y desarrollo, referidos a los gastos no financieros (capítulos 1-7), en un 25% anual."

La negrita (aclaro) es contribución mía (y de justicia es reconocer que en la pasada legislatura, efectivamente, se produjo un incremento notable en la inversión en investigación.) Es verdad, es verdad, que en el programa de 2008 las afirmaciones ya eran más "tibias":

"Para conseguirlo, los socialistas nos comprometemos a [...]:
- Un incremento sustancial de los recursos de la Administración General del Estado en I+D+i, focalizándolos en programas que movilicen al sector privado.
- El fortalecimiento de las instituciones científicas y de los recursos humanos"

y anunciaban ese giro hacia el sector privado, hacia la segunda "i" de I+D+i, que en estos momentos estamos presenciando. Aún así, se prometía "el fortalecimiento de las instituciones científicas y de los recursos humanos". Que le pregunten al personal del CIEMAT (Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas) cómo de fortalecidos se sienten con el recorte del 26% que les han prometido para el año que viene.

Uno, que no es la persona más intransigente del mundo, entiende que la situación económica en 2004, en 2008 y en 2009 no es precisamente la misma, que estamos en crisis y que todos tenemos que apretarnos el cinturón. Pero señores, pasar de un +25% a un -15% no sólo no es un "incremento sustancial", sino que llega a la categoría de tomadura de pelo. Es intolerable.

Sobre todo si tenemos en cuenta la situación de partida, que no es, ni mucho menos, idílica. Recientemente, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia declaraba: "Vamos a mantener las convocatorias del Plan Nacional y del Programa Ingenio en el mismo nivel que 2009". Es estupendo, ya me quedo mucho más tranquilo. Para el que no lo sepa (y supongo que muchos no lo sabréis, dado que a estas cosas no interesa darles mucha publicidad), el ministerio de la señora Garmendia había anunciado para este año dos convocatorias de becas postdoctorales, una en marzo y otra en otoño. Regalo una piruleta de fresa para el primero que adivine cuántas convocatorias han salido hasta el día de hoy, a la sazón 7 de octubre. En efecto, la respuesta que buscábamos es 0 (C E R O). Curioso, para un Gobierno que en su fantástico programa de 2004 (hay que ver el juego que nos está dando) afirmaba:

"Promoveremos los programas de intercambio universitario y de desarrollo de la investigación, mediante ayudas posdoctorales (risas)"

Lo de las risas también es aportación mía, y es que ya uno tiene que reírse porque si no corre el riesgo de quedarse sin lágrimas.

Comenzaba el post hablando de una iniciativa. Esa iniciativa consiste en que hoy, día 7 de octubre, todo aquel que estuviera en contra del recorte presupuestario anunciado por el Gobierno, escribiese una entrada en su blog (o en un blog creado a tal efecto) manifestando las razones de su oposición a la medida.

Así pues, a ello me dispongo, y con ello acabo. No hablaré de la trascendencia de la investigación, de los beneficios que ha tenido, tiene, y tendrá para la sociedad. No recurriré a lugares comunes. No hablaré de modelos productivos, de competitividad, de países vecinos. No hablaré de la importancia del conocimiento per se. Podríamos hablar de estas y muchas otras cosas, pero, siguiendo la línea desarrollada a lo largo de todo el post, concluiré citando, una vez más el programa electoral del PSOE en 2004, que, en su introducción, rezaba:

"La protección y el fomento de más y mejores empleos, la incorporación de la mujer al trabajo, la atención a los mayores, la preservación del medio ambiente, la convergencia social, la lucha contra la exclusión social, atención debida a la sanidad, la educación, la investigación y la innovación tecnológica son, para el Partido Socialista, políticas prioritarias en la Unión Europea"

A lo largo de este post he citado varias veces el programa electoral de 2004. Hay quien podría argüir que el programa de 2004 se refiere a un periodo electoral ya concluido, y que por tanto, no se puede juzgar al Gobierno en base a lo allí expuesto. Y tendría razón, no se puede.

Lo que si se puede es exigir al señor Zapatero que sea consecuente con el modelo de país que, desde 2004, nos ha intentado vender como suyo. Un modelo en que la investigación es una prioridad máxima, un pilar fundamental, algo que hay que cuidar y potenciar.

Usted nos vendió ese modelo de país. Y algunos le creimos. No nos traicione.